Redacción / La Voz 08 de agosto de 2012 19:02 GMT
Mientras la totalidad de los gobiernos municipales echan cuentas
del recorte que tendrán que aplicar a sus funcionarios y trabajadores locales
para restarles la paga extra de Navidad para dar cumplimiento al decreto que el
Gobierno de Mariano Rajoy aprobó el pasado 13 de julio, el Ministerio de
Hacienda acota el alcance de dicha medida excluyendo de la citada rebaja los
sueldos de alcaldes, concejales y demás políticos electos, como es el caso de
los diputados provinciales.
Al hilo de la confusión reinante sobre los criterios de
aplicación de la supresión de la paga extraordinaria, que supondrá en el
conjunto del Estado un ahorro de 4.000 millones de euros, técnicos del
departamento que dirige Cristóbal Montoro aclararon ayer a La Voz que en ningún
caso los cargos políticos electos estarán afectados por dicha medida. Con ello
podrá llegar a producirse que los empleados de un ayuntamiento pierdan el 7,1 %
de sus sueldos, el porcentaje correspondiente a la extra de diciembre, mientras
que los concejales y miembros del equipo de Gobierno no vean mermadas ni un
ápice sus retribuciones si así lo deciden.
Seis órganos políticos incluidos
Aunque el real decreto sí deja constancia de que el recorte
incluye a los altos cargos del Gobierno central, sus órganos consultivos, los
miembros del Consejo General del Poder Judicial, Tribunal Constitucional, de
Cuentas y Defensor del Pueblo, Hacienda aclara que no puede incluir en dicha
medida a los representantes políticos de las corporaciones locales y diputados
provinciales, dado su régimen de autonomía local. Solo por acuerdo de los
respectivos plenos puede adoptarse por tanto una decisión en la misma línea que
la decretada por el Ejecutivo de Rajoy, como también depende de los Parlamentos
de las comunidades e incluso de las Cortes la aplicación de una medida solidaria
con el recorte que sufrirán los funcionarios.
Decenas de ayuntamientos gallegos han anunciado, eso sí, rebajas
en las percepciones económicas de sus concejales, bien eliminando también la
paga extra, reduciendo el sueldo anual de los ediles en la misma proporción o
rebajando otros capítulos, como los de dietas, asistencia a plenos y comisiones
o las aportaciones destinadas a los grupos políticos de sus
corporaciones.