En Zaragoza, la Asamblea General de Registradores (la tercera que ha tenido lugar en su centenaria historia) ha acordado por abrumadora mayoría oponerse a asumir el Registro Civil.
Ésta será la postura oficial del Colegio de Registradores.
A la vista de ello el gobierno, y en concreto su ministro privatizador tendrá que decidir si deja todo como está, que todo sea dicho de paso, es un servicio público que está funcionando de manera satisfactoria, o por el contrario decide continuar con el proyecto de doble pago contra los ciudadanos, primero via impuestos y segundo via cobro directos por actuaciones registrales (inscripciones, certificaciones, y demás).